lunes, 12 de diciembre de 2022

Desarrollo sostenible: El papel de las comunidades energéticas y el compromiso del Municipio de Módena

Alessandra Filippi, teniente de alcalde de Módena, Italia

El signatario del Pacto de los Alcaldes Módena, Italia, apareció recientemente en la revista italiana Forum PA por sus esfuerzos en el campo de la descarbonización y la transición hacia la sostenibilidad. Destacaron el potencial de las comunidades energéticas, pero también la importancia de ser parte del Pacto Europeo de Alcaldes para lograr sus objetivos.

Ha sido primero la cumbre del G20 en Roma seguida de la COP26 en Glasgow las que han puesto claramente de manifiesto el estado de salud de nuestro planeta y la importancia de actuar sin más dilación poniendo en marcha una transición energética efectiva y desarrollando una estructura económica y productiva que atienda a la sostenibilidad medioambiental. en cuenta. El Municipio de Módena pretende ser protagonista en esta transición energética para luchar contra el cambio climático. Por otro lado, ante la pandemia mundial del COVID-19, millones de personas salieron a las calles para exigir justicia climática. Dado que las crisis social, sanitaria y climática están interconectadas, estos problemas necesitan soluciones comunes. Las comunidades energéticas podrían ser una solución para abordar todos estos problemas.

¿Qué son las comunidades energéticas?

Una comunidad energética se basa en un sistema colaborativo entre organismos públicos locales, empresas, negocios y ciudadanos, que optan por desarrollar infraestructuras energéticas a partir de fuentes renovables y utilizar el autoconsumo a través de un modelo basado en compartir. Esta es una gran herramienta para luchar contra el cambio climático, pero también para combatir la pobreza energética, que afecta a más de 2 millones de familias italianas. Al involucrar directamente a la comunidad, acelera la necesaria sensibilización y formación en temas tan fundamentales.

Las comunidades energéticas deben ser reconocidas internacionalmente como fundamentales para lograr los objetivos del Acuerdo de París, ya que son instrumentos que podrían solucionar varios problemas a la vez.

Concienciación e implicación de los usuarios

Las Comunidades Energéticas pueden involucrar a un gran número de actores sociales en el desafío de la descarbonización. La proximidad de las plantas a los consumidores dará lugar, en muchos casos, a instalaciones en tejados o en las inmediaciones de edificios, desplazando la atención hacia la cuestión de la participación ciudadana activa. La implicación de los usuarios individuales y los beneficios económicos de estos sistemas llevarán a los miembros de las Comunidades a comportamientos más virtuosos de eficiencia energética y, en general, a una mayor conciencia de las dinámicas que caracterizan la producción, el consumo y la comercialización de energía eléctrica.

Estos elementos pueden conducir al uso de soluciones tecnológicas innovadoras, como un modelo que moldee el perfil de carga según las necesidades de la red, por lo tanto, las acciones de los consumidores. Al otorgar más responsabilidad a los clientes finales, se sentirán obligados a alinear sus perfiles de carga y producción y realizar un primer balanceo de su propio pequeño sistema.

Un marco legal en evolución

La Directiva de Energías Renovables (RED II), su transposición parcial y la conversión en ley del decreto italiano Milleproroghe definen el marco legal de las comunidades energéticas. Establece la posibilidad de crear comunidades que intercambien energía con fines de autoconsumo colectivo instantáneo y diferido.

El informe Legambiente de mayo de 2021 titulado "Municipios renovables" encuestó al menos 30 configuraciones locales de comunidades energéticas que utilizan fuentes renovables y se dedican al autoconsumo colectivo. Es un movimiento que va más rápido que las instalaciones de las grandes plantas y que muestra una clara voluntad de un enfoque de abajo hacia arriba.

El compromiso del Municipio de Módena con el Pacto de los Alcaldes

El proceso de descarbonización ha experimentado una fuerte aceleración en los últimos años y los temas de sostenibilidad ambiental, económica y social se han vuelto centrales no solo a nivel europeo, sino también en las políticas de las autoridades locales. Módena tiene una ubicación que es crítica para la calidad del aire y, por lo tanto, el cambio de energía verde es particularmente urgente para mejorar el bienestar de las personas.

La mayoría de los municipios miembros de la AESS se han unido a la red del Pacto de los Alcaldes y han elaborado Planes de Acción (Clima) y Energía Sostenible (PACES). En el Municipio de Módena, el Plan fue aprobado en febrero de 2021 con el objetivo declarado de reducir las emisiones de CO2 en al menos un 55% para 2030, en línea con los objetivos de la UE. La iniciativa del Pacto de los Alcaldes tuvo un impacto positivo en el territorio nacional, con la participación de un gran número de ciudades y actores y un aumento de la conciencia sobre el tema climático.

Dado que algunos municipios pequeños y medianos han encontrado problemas internos, se debe habilitar nuevas herramientas y/o hacer más efectivas las existentes para que puedan participar al máximo en la implementación de sus Planes de Acción. Este plan parece funcionar bien porque un número cada vez mayor de ciudades se involucran de manera proactiva con sus partes interesadas locales y crean con éxito comunidades energéticas.

Proyectos específicos de comunidades energéticas

Fruto de la cofinanciación del fondo europeo EIT Climate-KIC , en septiembre de 2019 AESS, ENEA y la Universidad de Bolonia han puesto en marcha el proyecto GECO (Green Energy Community) con la participación de ciudadanos, asociaciones locales y empresas. Para 2023 conducirá a la creación de la primera Comunidad Energética virtual de Emilia-Romagna, concretamente en Bolonia.

GECO facilitará el desarrollo de 8 nuevas plantas de energía renovable que se traducirán en una planta para el centro agroindustrial CAAB/FICO, una planta de biogás para la eliminación de residuos orgánicos, plantas solares fotovoltaicas en varios edificios residenciales, centro comercial, en los techos del Fashion Research Institute, ZR Experience y empresas vecinas.

Todo ello para un total de 14 MW de nueva potencia generada por plantas fotovoltaicas, que en 2023 producirán más de 15,4 millones de kWh/año, con una reducción de 120 MWh/año de energía, evitando la emisión de 58.000 toneladas de CO2/año a la atmósfera.

El proyecto está en marcha y consiste en el desarrollo de una plataforma para el análisis de flujos de energía (producción, almacenamiento y consumo), que es útil para asegurar la flexibilidad energética dentro de las Comunidades para que los miembros de la Comunidad puedan monitorear su consumo de energía y contribución a la comunidad.

Comunidades energéticas: preguntas abiertas

La transposición parcial de las directivas europeas en materia de autoproducción e intercambio energético ha permitido el arranque de muchas iniciativas, con resultados increíbles teniendo en cuenta que la ley fue aprobada hace poco más de año y medio. Pero surgieron algunos problemas críticos y algunas preguntas permanecen abiertas.

El dimensionamiento de las comunidades energéticas

El dimensionamiento de las comunidades energéticas, en base a un parámetro electrotécnico, muchas veces resulta limitante en cuanto al potencial de participación que suele darse en las experiencias de proyecto, especialmente para estructuras por encima de 150 kW.

Los incentivos hoy solo premian la energía compartida a través de una tarifa sin importar el tamaño de las plantas. Uno de los temas críticos identificados está vinculado a las configuraciones de pequeñas plantas, que demuestran ser sostenibles solo a través de las deducciones fiscales y el superbono. Para garantizar la perpetuación de estas experiencias de abajo hacia arriba, estos proyectos también deben ser económicamente viables.

Gobernanza del mecanismo

Un tema delicado es la gobernanza del mecanismo: desafiado en Europa por una enmienda que prevé la desagregación de los beneficios debidos a los afiliados directamente de sus facturas, crea una serie de posibles complejidades en la gestión y corre el riesgo de invalidar los modelos de negocio actualmente desarrollado. Además, en términos de gobernanza, es necesario pensar en modelos que puedan gestionarse de abajo hacia arriba para configuraciones pequeñas, sin correr el riesgo de que los costes de gestión complejos puedan afectar a los beneficios y hacerles perder su atractivo. También deberíamos pensar en un papel activo de los gestores en este sentido, aplicando la deducción directamente en la factura, pero de forma gratuita y no obligatoria.

Una aceleración necesaria para alcanzar el objetivo de neutralidad climática

Hoy, en Italia, más de 1,1 millones de plantas de fuentes de energía renovable satisfacen el 37,6% del consumo total de electricidad y el 19% del consumo total de energía, a través de una combinación de tecnologías destinadas a producir energía eléctrica y/o térmica repartidas por todos los municipios. Para mantener los compromisos adquiridos y respetar los plazos, es necesaria una intervención rápida y concreta para acelerar el proceso. En este sentido, una contribución válida podría provenir de la comunidad energética.

Fuente: Pacto de los Alcaldes

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