miércoles, 22 de julio de 2020

ES NUESTRO PLANETA. NUESTRA CASA. Y NUESTRA VENTANA ES AHORA.


Nunca ha habido un momento más crítico para trabajar juntos para hacer una diferencia real. El cambio climático no solo está sucediendo en el futuro, está sucediendo ahora mismo.

¿Pero podemos resolverlo?

La naturaleza nos ha estado dando señales y es hora de seguir su ejemplo.

National Geographic y Procter & Gamble están reuniendo a expertos y líderes climáticos
para discutir el poder de la naturaleza como una solución climática,
para escuchar, aprender y amplificar las voces que más se necesitan escuchar, y para acelerar las acciones necesarias para abordar cambio climático global.

Únete a la conversación #ItsOurHome

Fuente. National Geographic

La Ley del Cambio Climático salva su primer escollo en el Congreso.

El proyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética salvó este martes su primer escollo en el Congreso de los Diputados. La Cámara baja rechazó la enmienda a la totalidad que había presentado Vox, formación que entiende que la norma va en contra de la emergencia económica y social ocasionada por la Covid-19. La vicepresidenta para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, consideró su iniciativa una medida necesaria para adaptarse a las «bases del siglo XXI que piden los ciudadanos», en coherencia con la revolución verde que está por llegar.

Mireia Borrás Pavón, portavoz del grupo de ultraderecha, aseguró que el Gobierno pretende imponer un «ideario liberticida» y «culpabilizar a agricultores y ganaderos» del cambio climático. Así, empleó un discurso negacionista y sostuvo que las emisiones españolas de CO2 representan apenas un 0,7% de las mundiales. Por ello, según la representante de Vox, la iniciativa gubernamental «pone seriamente en riesgo la industria» y redundará en el aumento del desempleo.

La norma aboga por desenganchar a España de su dependencia de los combustibles fósiles y busca afianzar las políticas necesarias para se cumpla el Acuerdo de París, además de las disposiciones europeas. El Gobierno presenta dicha ley como una oportunidad para salir de la crisis económica originada por el SARS-CoV-2. Desde las grandes multinacionales y bancos a la Comisión Europea, la mayoría de los países europeos entienden que abordar los retos del cambio climático supone un incentivo para crear empleo y riqueza. No en balde, las propias instituciones de la UE apuestan por las energías renovables, la movilidad eléctrica y la rehabilitación de edificios.

El texto establece una senda con pasos intermedios, como alcanzar en 2030 una rebaja de las emisiones de dióxido de carbono (CO2) del 20% con respecto a 1990. En su preámbulo, la futura ley prevé que la transición energética movilizará más de 200.000 millones de euros de inversión -el 70% capital privado y el resto público- entre 2021 y 2030.

El Ministerio para la Transición Ecológica pretende acelerar muchas de las inversiones que estaba previsto se aplicasen a lo largo una década. Aduce en su descargo que el proyecto ejercerá de locomotora de la economía. La norma destaca que el empleo neto se incrementará entre 250.000 y 350.000 personas de aquí a 2030.

Solo Foro Asturias
El grupo ultra solo consiguió convencer a Foro Asturias, el único que se sumó al rechazo del proyecto de ley. Todos los demás unieron sus fuerzas para aceptar la admisión a trámite del texto, sin perjuicio de que luego se incorporen enmiendas, como anunció que haría Idoia Sagastizabal, del PNV.

La representante del PSOE, Helena Caballero Gutiérrez, subrayó que Vox ni siquiera se ha tomado la molestia de redactar un texto alternativo. Los planteamientos de la ultraderecha, dijo Caballero, «atentan contra la racionalidad científica», dado que el 97% de los investigadores está de acuerdo en que el incremento de las temperaturas y el deshielo de los polos es obra del hombre. Para la portavoz socialista, España es uno de los países más damnificados por la crisis climática pues sufre con mayor rigor las inundaciones, las sequías y los incendios forestales. «España es el país donde más ha aumentado la emisión de gases de efecto invernadero», argumentó.

El PP votó en contra de la devolución del texto, si bien marcó distancias con el Gobierno. Su representante, Diego Gago, acusó a la izquierda de arrogarse la bandera del ecologismo y censuró que el Ejecutivo pretenda imprimir mayor velocidad a las medidas para lograr la transición energética. A su entender, el Ejecutivo planea el cierre de las centrales nucleares sin haber encontrado una alternativa. «Nos preocupa la tarifa eléctrica», alegó Gago. «Esperemos que este Gobierno sea capaz de colaborar con las empresas», sentenció.

El negacionismo cae en saco roto en la sociedad española
El negacionismo climático que invoca Vox tiene escasos adeptos en la opinión pública española. Según el Estudio Europeo de Valores de la Fundación BBVA para 2019, un 80% de los españoles está «totalmente» de acuerdo en que el cambio climático es un problema muy grave y preocupante». En el extremo opuesto, los escépticos apenas representan entre un 1% y un 2%. Para Vox, el Gobierno aspira a imponer leyes coercitivas y a aumentar los impuestos con la excusa de la subida de las temperaturas.

FUENTE. laverdad.es

Alertan de la emergencia climática. Greenpeace hace 'desaparecer' las Islas Cíes para pedir a los gallegos que voten pensando en el planeta

Greenpeace alerta de que si no se frena la emergencia climática, el mar terminará por hacer 'desaparecer' las Islas Cíes.


Activistas de Greenpeace acudieron a la playa de Rodas, de las Islas Cíes, para mostrar una fotografía en la que el mar hace 'desaparecer' ese entorno si no se frena la emergencia climática, con la que los ecologistas pretenden hacer reflexionar a la ciudadanía gallega para que este domingo vote pensando en el planeta.

Durante la acción, un voluntario de Greenpeace sujetó una fotografía modificada en la que se puede ver la subida del nivel del mar que se alcanzará en el Parque Nacional Marítimo-Terrestre de las Islas Atlánticas de Galicia si no se siguen las recomendaciones de la comunidad científica para enfrentar el cambio climático.

La playa de Rodas une actualmente dos de las Islas Cíes, la de Monteagudo y Faro, pero la posible subida del nivel del mar provocaría su separación. Detrás de la imagen simulada, la realidad actual de una playa paradisíaca que aún puede salvarse. Y en el cartel, un mensaje clave: 'Emergencia climática: Tu voto decide'.


Greenpeace quiso de esa forma llamar la atención de los millones de gallegos llamados este domingo a las urnas para recordarles que las decisiones políticas son en gran medida las que pueden cambiar patrones o tomar caminos adecuados para dar soluciones a los problemas medioambientales y para pedirles que voten teniendo esto en cuenta.

El aumento del nivel del mar para 2100 podría ser de casi un metro si el calentamiento global supera los 3°C respecto a la era preindustrial, que es lo que ocurrirá con los insuficientes compromisos adquiridos actualmente por los países, según un informe sobre océanos del Panel Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés).

"Es el futuro que nos espera si no actuamos de forma urgente ante el cambio climático"

Ante la imagen que muestra la transformación que sufrirían las Islas Cíes, Manoel Santos, coordinador de Greenpeace en Galicia, afirmó: "Es el futuro que nos espera si no tomamos en serio las advertencias de la ciencia y no actuamos de forma urgente y contundente ante el cambio climático. La próxima Xunta de Galicia tendrá una responsabilidad muy grande. Por eso, pedimos a la gente que piense en el medio ambiente a la hora de votar. Ante la crisis ecológica en la que estamos inmersos el silencio no es una opción".

Greenpeace demanda que la próxima legislatura se establezca la hoja de ruta para lograr una reducción de al menos el 55% de las emisiones de CO2 para 2030 respecto a 1990 y el cero neto para 2040, y se apruebe una Ley Gallega de Cambio Climático ambiciosa en términos de reducción de emisiones y transición justa.

FUENTE> lasextanoticias.com

Los veranos en España en 2050 llegarán a los 50 grados con dos meses de noches tropicales y lluvias torrenciales

- En 2050 se podría notar más el efecto del cambio climático y agravarse si aumenta la tasa de contaminantes.
- Lo que ahora consideramos noches extremadamente cálidas a partir 2050 serán lo habitual.
- Desde 1975 se han dado 57 olas de calor en España y la tendencia es que aumenten de frecuencia e intensidad.
- ¿Cuál es la temperatura máxima que puede soportar el ser humano?



Los veranos en España dentro de 30 años podrán registrar olas de calor con temperaturas de hasta 50 grados centígrados, sequías y lluvias torrenciales y las noches tropicales podrían alargarse más de dos meses en puntos del Mediterráneo, Sevilla, Cádiz y en la ciudad autónoma de Melilla.

Según un estudio de eltiempo.es, el verano en 2050 podría dejar notar aún más los efectos del cambio climático, que podrían agravarse incluso si se tiene la tasa más alta de contaminantes y forzamiento radiactivo, es decir, un escenario más pesimista.

El informe alerta de que si no se limita el calentamiento global del planeta a un aumento de 1,5 grados centígrados y se excede notablemente ese umbral podría tener graves consecuencias en algunas regiones españolas en las próximas décadas.


En concreto, se refiere a efectos como la dificultad de conciliar el sueño por el aumento de las noches tropicales, el aumento de la temperatura media o las inundaciones por las fuertes precipitaciones, son solo algunas de ellas.

En su predicción, apunta que los veranos en 2050 estarán marcados por temperaturas muy altas, con una estación "sumida en una ola de calor" con valores que podrían alcanzar "fácilmente" 42ºC en Madrid, 44ºC en Bilbao, 45ºC en Valencia y Santa Cruz de Tenerife, y hasta 49ºC se podrían alcanzar en Sevilla y en Córdoba.

Además, añade que la tendencia es que las olas de calor aumentarán su frecuencia e intensidad y que los valores estarán por encima de umbrales actuales de ola de calor. De hecho, también es previsible que el aumento de las temperaturas eleve el umbral para que se considere ola de calor.

El estudio expone que mientras en Madrid en 2020 hay que superar los 39ºC para que se considere ola de calor, pero dentro de 30 años ese valor será "más habitual" y habrá que sobrepasar los 39ºC y los 43ºC en zonas como el valle del Guadalquivir.

En ese momento también se agravará la duración de las olas de calor, si bien en la actualidad las olas de calor más largas duran una semana en Madrid, Barcelona o Baleares, estas podrían llegar a los 11-13 días en 2050. Las más dilatadas podrían extenderse unas dos semanas en puntos del interior peninsular y superar los 20 días en el litoral mediterráneo.

La definición de ola de calor establece que como mínimo durante tres días se tienen que superar en el 10% de las estaciones el percentil 95 de la serie de temperaturas máximas de los meses de julio y agosto. Desde 1975 se han dado 57 olas de calor en España y la tendencia es que aumenten de frecuencia e intensidad.

Perjudicial para la salud
Precisamente, el estudio añade que el calor se agravará durante las noches, especialmente en las ciudades donde el efecto isla de calor dificultará aún más el enfriamiento nocturno, ya que aumentarán hasta hacerse "muy habituales" las noches tropicales.

En comparación de las temperaturas mínimas de media en verano de 2020 y las de 2050, en Madrid pasarán de 16ºC a 18ºC, mientras que en Zaragoza se sumarán 3ºC más que en 2020. En el área del Mediterráneo lo normal será tener mínimas de unos 21ºC, por lo que las noches tropicales serán muy habituales.

Por ejemplo, haciendo un cómputo total de las noches tropicales durante el verano, regiones del Mediterráneo podrían superar los 60 días, mientras que en Sevilla, Cádiz, Ceuta o Melilla donde llegarían a ser entre 68 y 70 noches con mínimas superiores a 20ºC.

En Madrid, Zaragoza y Cáceres el número de noches tropicales se duplicará con respecto al actual y en ciudades de Castilla y León este valor se triplicará.

Además de las noches tropicales, serán muy habituales las noches cálidas, ya que prevé que en la costa Mediterránea y numerosos puntos del interior habrá más de 40 noches cálidas donde las mínimas estarán por encima del percentil 90 de finales del siglo pasado.

"Lo que ahora considerábamos noches extremadamente cálidas a partir 2050 serán lo habitual, ya que podrían producirse casi la mitad de los días de la estación estival", señala.

De hecho, calcula que a finales de este siglo se registrarán aún más noches tropicales que en 2050. En concreto, prevé que en Madrid serán 57 noches; en Barcelona, 61 y entre 70 y 75 noches tropicales en ciudades del litoral mediterráneo. En cuanto a Andalucía, apunta que "prácticamente todas las noches del verano serán tropicales con mínimas superiores a los 20ºC".

Sequías y lluvias torrenciales
Respecto a las precipitaciones, considera durante los veranos de dentro de 30 años podría haber regiones en las que no se registre una sola gota en más de 60 días. Estas sequías se alternarán precisamente con las inundaciones en las zonas más áridas del país.

Del mismo modo, alerta de que la superficie árida seguirá aumentando en España, que a principio de este siglo era de aproximadamente el 4,4% del territorio y en 2050 ese porcentaje aumentará hasta el 6% e incluso podría extenderse más, hasta llegar a todo el sudeste peninsular, que adquiriría un índice semiárido y árido.

El estudio avisa también de que en el Mediterráneo se darán pocas lluvias pero cuando se produzcan predominará la torrencial que provocará inundaciones y aumentará el riesgo de catástrofes naturales que provoquen más daños físicos.

Por último, el tiempo.es ha pronosticado que que en 2050 la cuenca del Segura será donde menos días llueva a lo largo del año. De los 365 días al año, en 309 no lloverá y en otras cuencas hidrográficas de la mitad sur estarán más de 300 días al año sin recoger precipitaciones apreciables.

FUENTE. 20minutos.es