martes, 28 de febrero de 2023

5 soluciones rápidas y justas para el transporte urbano

Un nuevo informe de la Campaña Clean Cities que analiza propuestas win-win para garantizar que las restricciones al uso del vehículo privado se pone en marcha con un enfoque social y global.

"Cambiar nuestra forma de movernos no nos hará peores"

Esta es la conclusión de un nuevo informe presentado hoy por la campaña Clean Cities. El informe presenta 5 medidas eficaces que los responsables políticos pueden emplear para que las políticas para "limpiar" el transporte urbano -como las zonas de bajas y cero emisiones- tengan en cuenta las necesidades de los grupos vulnerables de la sociedad.

Mientras los hogares luchan contra la subida del coste de la vida, es importante recordar que también hay costes asociados a la carga sanitaria de la contaminación atmosférica. El informe destaca la evidencia de que los hogares con bajos ingresos tienden a soportar impactos más graves asociados a la contaminación.

¿Por qué necesitamos una movilidad urbana sin emisiones?

Los habitantes de las ciudades europeas se enfrentan a múltiples crisis: presiones por el coste de la vida, impactos de la contaminación atmosférica y la emergencia del clima. Cada una de ellas puede afectar desproporcionadamente a los grupos más vulnerables como son las personas que viven en zonas mal comunicadas o mal conectadas, personas procedentes de otros países y ciudadanos con algún tipo de diversidad funcional. Está demostrado que estos grupos son los que más sufren los efectos nocivos para la salud del transporte por carretera contaminante, y, sin embargo, suelen ser los que menos contribuyen al problema. Por lo tanto, creemos que las políticas de transporte urbano deben diseñarse prestando especial atención a las necesidades de estos grupos. Ello contribuirá a evitar que se vean injustamente afectados y garantizar un fuerte respaldo público a las medidas políticas.

Cinco soluciones

Para la elaboración de este informe, la campaña Clean Cities ha realizado una revisión sistemática de las mejores prácticas implementadas que demuestran que ya existen soluciones probadas, y que éstas pueden aplicarse en todas las ciudades europeas. Se ha establecido una larga lista de políticas que luego se han evaluado con arreglo a tres criterios: la rapidez con que pueden promulgarse, su equidad con respecto a los grupos vulnerables y su rentabilidad. El resultado es la siguiente breve lista de cinco soluciones con las que todos ganan para la introducción rápida y justa de políticas de transporte en las ciudades:

  1. Programas de achatarramiento.
  2. Reducción en la compra de bicicletas.
  3. Transporte público.
  4. Centros de movilidad compartida.
  5. Alquiler social de vehículos eléctricos.

Toma de decisiones

Basándose en estos resultados, la campaña Clean Cities hace un llamamiento a los líderes municipales y a los gobiernos para que:

Den prioridad a los objetivos e indicadores de equidad en las políticas de transporte.

Establezcan urgentemente un paquete de políticas a corto plazo que combine varias de las medidas de eficacia probada enumeradas anteriormente.

Fijen un objetivo claro de transporte urbano con cero emisiones para 2030: el camino más eficaz hacia ciudades más sanas, habitables y justas.

Fuente: ECODES

No hay comentarios:

Publicar un comentario